Como utilizar las redes sociales de forma segura

Utilizar las redes sociales de forma segura, sin la preocupación de que ocasione trastornos psicológicos, es algo que preocupa hoy en día en nuestra sociedad. Hacemos hincapié en el avance de esta tecnología a través de las redes sociales en un tema que inquieta, sobre todo para los niños y los adolescentes, ya que son los puntos clave para que impedir que desarrollen un acto cognitivo-conductual con total normalidad.

Sin ir más lejos, esto no se estanca sólo en los niños, sino que muchas personas en edad avanzada ya van incrementando su adicción utilizando las redes sociales y sin mantener una forma segura en su manejo. Esto crea adicción, dependencia y estrés, toda una simplicidad de detalles que se enraízan como una primera necesidad.

Las redes sociales

Cuando hablamos de redes sociales nos vienen a la cabeza aplicaciones como Facebook, Twitter, Instagram o Whatsapp. Todas ellas se utilizan como medio para interactuar entre personas conocidas o entre sociedades y grupos desconocidos.

Cerca del 50% de la población mundial utilizan estos medios de comunicación y por lo tanto su conexión es diaria. Hay que reseñar que en este tipo de uso es importante educar de uso correcto desde que son adolescentes, pero muchos no han tenido esa disciplina gracias a la rápida implantación en nuestro sistema.

¿Cuándo se reporta como “adicción”?

Podemos estar haciendo un buen uso o no de su manejo, sólo hay que saber evaluar cuando puede provocarnos una adicción que a la larga no puede ser buena, analiza dónde están las adicciones:

• Si lo primero que haces cuando te levantas es consultar tus redes sociales en busca de novedades.
• Te mantienes en línea casi todo el día. Entre estas acciones conllevan a actualizar tu perfil constantemente, a interactuar con la gente por mensajes o acciones escritas, publicar y fotografiar todo lo que te sucede incluso lo que ocurre a tu alrededor.
• Observas constantemente la vida de los demás y la comparas contigo, pensando que no es igual de satisfactoria. Le pones “me gusta” a casi todo y te mantienes activo en todo lo que se publica.
• Puedes llegar a sentir frustración sino llegas a acaparar la atención de lo que compartes.
• Si no tienes control de dónde está tu teléfono localizado o se te olvida, te puede provocar una gran ansiedad o estrés.

¿Qué provoca dentro de nosotros?

Todo lo que te detallamos a continuación reporta a grandes rasgos “una adicción”, la cual puede repercutir en reducir el tiempo de tus tareas habituales, tales como pasar menos tiempo físicamente con tus familiares y amigos, reducir tus labores cotidianas como comer, dormir u obligaciones con tu familia.

Absorbe mentalmente el funcionamiento correcto y normal de una persona dentro de su día ordinario. El abuso de estas redes sociales puede producir el aislamiento y el desinterés por todo lo que le rodea, incluso puede ocasionar irritabilidad, sedentarismo o alteraciones del sueño.

Este otro dato puede afectar mucho más a los adolescentes, pero puede llevar a predicar con igual de vulnerabilidad a cualquier persona: puede afectar a un malestar emocional, crea y provoca impulsividad en sus actos, e incluso puede bajar la frustración de las personas, sin llegar a poder afrontar o canalizar bien los disgustos o emociones fuertes.

Hay ocasiones muy particulares que en diversas situaciones, se lleva al límite esta dependencia, en las que las persona se impulsan a tener timidez excesiva con una bajada de su autoestima. No llegan a tener una correcta vida social o familiar por lo que este tipo e carencia les llega a favorecer a episodios de depresión.

Consejos para superar la adicción a las redes sociales:

• Hay que buscar algún tipo de actividad que ocupe mayormente tu tiempo libre. Planifica esos momentos para cuando vayas a comenzar a independizarte del celular.
• En principio deja tu teléfono reposando, en un lugar dónde no tengas fácil acceso. Puedes seguir utilizándolo para hacer o recibir llamadas, pero lo principal es no tener contacto con internet.

• Esta otra parte es difícil, pero puedes cerrar la sesión de muchas de las aplicaciones para evitar recibir notificaciones o vibraciones, o al menos intentar silenciarlas.
• Debes buscar tiempos que pausen el compromiso a estar pendiente de el móvil, y que estos tiempos sean cada vez sean más prolongados. Nadie dice que no vuelvas a tomar conexión con las redes, pero hay que evitar seguir la misma rutina de antes.
• Si es necesario contactar con tu redes en algunos momentos, no dependas de estar pendiente de tu perfil, ni de actualizar fotos, ni de participar de forma constante en todas las acciones.
• Ocupa tu tiempo buscando películas o series en televisión, queda con amigos, lee, haz deporte, toca un instrumento o incluso haz una lista de todas aquellas actividades que podrían motivarte, seguro que algo positivo a nivel personal puedes encontrar de esta nuevas experiencias.

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