La autoestima es la apreciación que tiene una persona sobre sí misma. Este tipo de percepción si es baja la entendemos como una visualización de nosotros mismos de forma subjetiva o de forma incómoda, no valorándonos. Todo irá basado en los sentimientos, sensaciones, experiencias o pensamientos que han acontecido a lo largo de nuestra vida o en un momento puntual, para que este tipo de sentimiento se relacione con nuestro momento personal. Es por ello que debemos lograr subir la autoestima.
La baja autoestima es una percepción negativa sobre uno mismo. Acarrea a una serie de factores que nos puede limitar mucho en nuestra vida diaria, y es que muchas de estas personas tratan de intentar reconocer este problema o acuden a un profesional para que puedan ayudarles a reconocer su problema y cómo solucionarlo.
Síntomas de que padeces una baja autoestima
Todo el mundo tenemos una imagen mental de nosotros mismos, de quienes somos, de cómo actuamos frente a los demás, de si somos buenos y aún así, sopesando todos nuestros puntos débiles. Es aquí cuando estamos formando nuestra imagen desde pequeños hasta el punto de hoy y creamos una autoimagen. En esta parte es cuando nosotros hacemos nuestra propia crítica y valoramos cuál es nuestra autoestima, si llega a estar alta o baja. Los síntomas principales que advierten de una baja autoestima pueden ser:
- No sentirte feliz contigo mismo, siempre estás abajo para cualquier decisión y eso se subraya en no tener seguridad en sí mismo.
- No quieres expresar tus gustos y opiniones por tener miedo a no ser valorados correctamente. Es por ello que no te relacionas con frecuencia con los demás por pensar que no vas a gustar, o no vas a hacerlo bien.
- No te esfuerzas por conseguir lo que quieres hasta el final, a medio camino quizás ya hayas tirado la toalla pensando en que no lo vas a lograr. Esto es porque piensas que no estás satisfecho con lo que haces, que podría estar mejor, y eso te desmotiva con gran facilidad.
- Muchas veces te dejas pisar con facilidad, ya que no te atreves a imponer tu carácter cuando es necesario. Piensas que cualquier decisión u opinión puede llegar al fracaso. Es por ello que te cuesta siempre tomar una iniciativa ya que te infravaloras en situaciones sociales y crees que no vas a gustar.
- Ves a los demás superior a ti y te gustaría ser como ellos. Para sentirte bien necesitas muchas veces la aprobación de los demás con mayor frecuencia. Atribuyes tus logros a la suerte, a causas externas y tus fracasos a culparte a ti mismo.
Cómo subir la autoestima
Hay que reconocer que la baja autoestima no ayuda a crecer como persona. A la larga produce problemas de conducta y de cara a la relación que queramos afrontar con los demás puede producir ansiedad y estrés. Puede ocasionar depresión y poca seguridad en sí mismo por lo que hay que ir poniendo grandes remedios, con seguridad y constancia:
- Busca el motivo de la causa. Quizás el motivo venga suplantado a un problema de la infancia y el saber y buscar el origen quizás te dé más confianza. La infancia es el pilar de nuestra personalidad para un futuro y si hemos sufrido alguna desavenencia importante es mejor superarla con mucha autoayuda o buscando ayuda profesional.
- Deja de darle vueltas a la cabeza. Si quieres empezar por ayudarte tú mismo deja de pensar siempre en lo mismo. Puedes meditar tus pensamientos, buscando un momento de relajación y haciendo una visualización creativa, pero en momentos de angustia y tensión no fuerces a pensar siempre en lo que quizás no tenga ninguna salida al no pensar con realismo.
- El objetivo es ser feliz. Busca todos aquellos momentos y hechos que te ayuden a sentirte bien y ser feliz. Todo aquello que te hace ser positivo valoralo como se merece, observarás que tienes muchas cualidades positivas y tienes que saber explotarlas. Quiérete mucho a ti mismo.
- Ponte metas que puedas cumplir. Son retos fáciles que te puedas proponer y que te veas capaz de llegar a superar. Poco a poco podemos ir aumentando lo que nos proponemos y eso nos ayudará a subir la autoestima. Debes de aprender que si no sale a la primera y fracasamos nos hará aprender de nuestros errores, es ahí donde debemos impulsar nuestro saber y hacerlo de manera distinta, nunca rompas esa iniciativa.
- No te compares ni te hagas duras críticas. Debes de centrarte en ti mismo y no envidiando la vida de los demás. En lo primero que tienes que trabajar es en aceptarte y perdonarte. Funciona muy bien escribiendo una carta sobre ti mismo. En ella describe todo lo que no te gusta de ti y de todo aquello por lo que te sientes culpable. Aunque tardes varios días en redactarla no te olvides de ningún detalle. A partir de ahí haz una crítica constructiva y valora lo que puedes mejorar. Despídete finalmente de esa carta rompiéndola en mil pedazos.
- Medita tu día todas las noches. Sólo tú puedes valorar las cosas positivas que han acontecido para que sea un buen día, y si no las ha habido, agradece siempre todo, que por alguna lógica ha sucedido. Quédate con lo bueno y rechaza lo negativo, si sigues este ejemplo a la larga puedes ayudar a subir la autoestima.
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